sábado, 24 de febrero de 2018

Sin más

Sin esperar.
Sin buscar.
Sin pretender.
Sin planear.
Sin saber.
Sin calcular.
.
.
.
Sin respuesta.
.
.
.
Ni lo esperas.
Ni lo buscas.
Ni lo pretendes.
Ni lo planeas.
Ni lo sabes.
(¡Más quisieras!)
Ni lo calculas.
(Siempre fuiste más de letras.)
.
.
.
No hay más preguntas, señoría.

miércoles, 7 de febrero de 2018

SOY FEMINISTA

Porque soy mujer.

Porque amo intensamente.
Porque soy fuerte.
Porque puedo.
Porque no dependo.
Porque cargo.
Porque crío.
Porque creo.
Porque sé.
Porque si no sé, aprendo.
Porque me equivoco.
Porque resuelvo.
Porque tropiezo.
Porque guío.
Porque no espero.
Porque salgo a buscar.
Porque batallo.
Porque lucho.
Porque me enfado.
Porque me emociono.
Porque he parido.
Porque, cada mes, me rompo y luego me remiendo.
Porque lloro.
Porque me cabreo.
Porque río sin control.
Porque tengo unas hormonas que van borrachas sin haber bebido.

Porque soy mujer.

Porque no entiendo nuestro papel infravalorado en esta sociedad hecha para los hombres.
Porque no entiendo que hasta la moda, la publicidad o una simple caja de leche nos diga cómo tenemos que ser, y cómo actuar para agradar.
Siempre agradar.
Siempre gustar.
Siempre cumplir.
Siempre llegar.
Siempre perfectas.
Siempre a punto.
Siempre listas.
Siempre por los demás. Para los demás. Y luego, si acaso, nosotras.
Siempre. Siempre. Siempre.

Y nunca,
nunca,
nunca
cobrando igual que el hombre ante idéntica responsabilidad laboral.
Nunca saliendo en titulares deportivos siendo considerada como simple deportista, como el hombre, sin que se juzgue nuestro aspecto físico, fundamental en cualquier competición, ya se sabe.
Nunca estando nominada a grandes premios nacionales, como el hombre, en el ámbito que sea.

Y a pesar de todo: SIEMPRE seguimos, no paramos, avanzamos, opinamos, revolucionamos, movemos, manejamos, dirigimos, inspiramos... HACEMOS GIRAR EL MUNDO.

Y a pesar de todo: NUNCA cosificamos, materializamos, infravaloramos o atacamos sin más al hombre, porque NO NECESITAMOS HACERLO.

Por eso soy feminista.

Y porque soy mujer... Mi fuerza no depende de ningún hombre, ni mi manera de hacer o ser dependen de su  opinión.

Sólo dependo de mí.
Que demuestro cada día que soy tan persona como cualquier hombre, tan capaz como cualquiera de ellos y libre, independiente y fuerte como ninguno.

Por todo ello... Sí. SOY FEMINISTA.